Salimos dpateo desde el Recinto Ferial de Arucas con dirección a los estanques de los alemanes
A la altura de San Gregorio se nos unió el amigo Nacho
Al final de este barrio de barrio, comenzamos a transitar por el canal, el cual no abandonaremos hasta mucho después
Pasamos por el túnel que atraviesa la montaña y que nos deja al pie de las presas de Tenoya
El acceso de bajada hasta las presas está bastante complicado y peligroso
Después de desayunar nos dirigimos al famoso canal alto del barranco de Tenoya. La abundancia de lluvia y las escorrentías, por estos lugares, que hemos tenido este invierno, ha provocado el crecimiento exagerado de la vegetación. De tal manera que para cruzar un tramo, que si no fuera por la vegetación nos hubiera llevado no más de media hora, estuvimos horas
Eso si. No solo fue la vegetación que nos dejaron heridas, en brazos y piernas, producidas por las zarzas, tuneras indias, con sus púas grandes y chicas (de las cuales no me voy a librar en días), también las tabaibas nos dieron una mano de su pegajosa "leche". Vamos la ropa, al menos la mía para tirarla
Y como si esto fuera poco, abejorros, abejas y avispas nos fueron picando, a unos y a otros, y a unos más que otros, en varias ocasiones, causando picores y dolores poco recomendables
Las conicabras trenzaban, como dice Juan Mateos, verdaderas lianas, que hacían, que por tramos, fuera muy difícil moverse debido a los continuos tropiezos y caídas
Después de horas de batalla llegamos al cementerio de Tenoya y acabamos con las penurias
Desde allí a La Cazuela, Los Giles y Las Canteras
Como resumen decir que lo peor, todo lo anterior (para olvidar). Lo mejor, las cervecitas y algo de comer en Las Arenas
Fotos de Rafael
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