Ya nos faltaba ver el fresco verde goteando, las fuentes manando y los charcos en los caminos
Subimos por lo que llamamos Aguas de Fontanales. Zona donde nos encontramos con muchos pozos de agua, la mayoría en activo
Casas abandonadas al lado de campos que en su día tuvieron que proveer a la zona de alimentos
Poco antes de llegar al la carretera de Artenara nos encontramos con multitud de setas, que evidentemente, han brotado en estos días, después de las lluvias. Las había de todas formas y colores. Diminutas, enormes, con colores pálidos o rojos que decían ¡¡¡ no me comas !!!
Al llegar a la carretera y justo en el cruce con la de Fontanales, vimos una carretera de tierra, que ya Miguel y yo habíamos visto, en otras ocasiones, desde el mirardor de los pinos de Galdar. Sin mucho pensar tiramos carretera abajo, a la aventura, si no fuera así esto no sería Dpateo, jejeje
Carretera acertada, muy comoda que nos dejó en el mismo campo de futbol de Fontanales
La otra opción era bajar por la piconera del mirador de los pinos de Galdar hasta llegar a la carretera de Fontanales. Una vez allí bajar por un sendero, que cuando está mojado patina una barbaridad, que nos había conducido, también, hasta el campo de futbol Así que la carretera que tomamos fue la opción acertada
Aquí dejo las fotos para que los aficionados micólogos del grupo puedan decir, si se atreven, cuales son o no comestibles
Un pateo perfecto
Fotos de Rafael
Fotos de Pepe López
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